El mejor ejemplo esta en nuestro Hogar. Turrialba libre de drogas

Que tiempos más difíciles los que estamos atravesando. Nadie nace aprendido… esa frase nos la dicen constantemente, y que cierto que es la misma. Que difícil ser Padre en este momento y que difícil ser hijo también.

Turrialba ha crecido y en su crecimiento también se desarrolla una serie de flagelos negativos, uno de ellos la drogadicción. Solo basta pasar por nuestros colegios principalmente el colegio nocturno, específicamente el sector de la plaza pública y ver la cantidad de muchachos, muchos con cara de niños que allí consumen la droga e incluso la venden, todo esto a vista y paciencia de los que transitamos por allí. Siempre me pregunto donde están los papás de estos muchachos… ¿saben que están haciendo ellos?

Sin duda la educación que podamos darle a nuestros muchachos es la base para que ellos puedan luchar contra tanta “presión” que pueda existir en nuestras calles.

La clave para combatir este monstruo está fundada en la educación y para lograr esta tarea es necesario el compromiso de la sociedad en conjunto. El bombardeo permanente de imágenes violentas en los juegos de videos, películas, juguetes, diarios, revistas y en la misma televisión hacen que hoy estemos viviendo una verdadera cultura de la violencia y la violencia, no sólo involucra agresión física, sino que también la violencia sicológica. La tarea de nosotros como adultos será orientar a los jóvenes y actuar de acuerdo a esta nueva forma de enfrentar las situaciones más cotidianas, con menos agresiones, tanto verbales como físicas.

Los padres somos el mejor ejemplo en las vidas de los niños y muchachos. Los niños que deciden que no van a usar el alcohol o las drogas, normalmente hacen esas decisiones porque están firmemente en contra de estas sustancias, son convicciones basadas en un sistema de valores. Usted puede explicarle claramente los valores de su familia si expresa la razón por la que toma cierta decisión sobre un tema y cómo esa decisión se refleja en los valores de su familia. Esto igual procede con el alcohol y el tabaco, los niños copiaran patrones que ven diariamente.

Saque tiempo en familia
Estos tiempos son tan acelerados que no nos permiten, en algunos casos, sacar tiempo para hablar en familia. Este tiempo puede ser vital para identificar y educar a nuestros hijos. Busque esos momentos por lo menos dos veces por semana, salgan a practicar deporte, a comerse un helado, o simplemente respeten el tiempo de la cena para poder conversar en familia, esto será un gran baluarte para evitar que sus hijos consuman drogas.

Algunos consejos

1. Si usted y su hijo(a) están caminando por la calle y ven a un grupo de adolescentes tomando, aproveche para hablarle sobre los efectos negativos del consumo del alcohol.

2. Vea la televisión con sus hijos y pregúnteles su opinión.

3. Cuando vea un comercial de antidrogas en la televisión, aproveche el momento para hablar sobre el tema de las drogas. Pregúnteles qué opinan sobre el comercial.

4. Es muy importante que usted sepa que puede usar cosas cotidianas para impactar la vida de sus hijos.

5. Escuche lo que dicen

6. Míreles a los ojos cuando les escuche, mantenga el contacto a los ojos.

7. Infórmese sobre cómo les fue en su día, que pasó en la escuela y con sus amigos.

8. Vaya a sus eventos, por ejemplo, a los deportes, partidos, obras, programas.

9. Juegue juegos con ellos.

10. Hable con ellos.

11. Conozca a sus amigos.

12. Entérese dónde están

13. Ponga expectativas claras de comportamiento

14. Sea consistente en su instrucción y disciplina

15. Anímelos mucho.

16. Desarrolle formas creativas y significativas para participar en sus vidas

17. Pídales su opinión

18. Enséñeles que importan

19. Cuando hagan algo bien, celébrelos

20. Hable con ellos sobre los peligros del uso y el abuso de las sustancias ilegales.

No cabe la menor duda que la lucha es fuerte pero también no cabe duda que si queremos un mejor Turrialba debemos de poner todo nuestro mejor esfuerzo.

Esta lucha inicia desde el hogar, inicia en nosotros. Sigamos adelante, por una Turrialba libre de drogas.

Dios bendiga a Turrialba, Dios bendiga a Costa Rica.